Los promotores del golpe ahora piden suspensión de elecciones
PERIÓDICO RENACER►
Fue hace unos nueve meses cuando los Comités Cívicos departamentales liderados por el de Santa Cruz impulsaron un golpe de estado financiado por EEUU en ocasión de la “ayuda” ante los incendios desde Jujuy (argentina), según concuerdan varias investigaciones.
Ante la dictadura conseguida para que este sector social consiga ventajas que no podían efectivizarlas con el anterior gobierno, tratan de mantenerse la mayor cantidad de tiempo para “diecidir” cuestiones vitales para Bolivia sin tener la legitimidad de la urnas. Es por eso que a sabiendas de que no hay posibilidad de que ganen las elecciones porque la pandemia los expuso tal cual son, intentan proscribir al candidato del MAS y ya hay varios planes en carpeta.
En principio se presiona desde el mismo gobierno al Tribunal Supremo Electoral para que inhabilite al candidato del MAS Arce Catacora por opinar sobre una encuesta ante una consulta periodística. Ya se pronunció el amenazador serial de la dictadura Ministro de la presidencia Arturo Murillo y quien cumaple el papel de indígena para la dictadura “Tata” Quispe quien amenazó al Tribunal Supremo Electoral que “terminarán en la cárcel, al igual que sus antecesores, si es que no anulan la personería jurídica del MAS”.
Mientras la mayoría de los medios intentan invisibilizar el colapso del sistema sanitario (solo los medios extanjeros lo difunden) y se quiere responsabilizar de un “posible desastre” a las elecciones del 6 de septiembre, se inicia un embate mediático empresarial para evitar las elecciones invocando “la salud de los bolivianos”
Es por eso que en una Resolución de los Comités Civicos Departamentales , digan:“Exigir la anulación del proceso electoral del 6 de septiembre de 2020 y realizar una nueva convocatoria a proceso electoral cuando las entidades técnicas médicas a cargo de la pandemia lo consideren seguro, desde luego sin la maquinita fraudulenta establecida y con un nuevo padrón electoral que ofrezca certeza y garantías a los ciudadanos para unas elecciones limpias y transparentes”
La decisión de los cívicos se tomó debido al incremento de casos COVID-19 y el peligro que supondría la aglomeración de un proceso electoral. También plantearon que antes de hacer elecciones, se debe realizar tareas como una auditoría al Padrón y su depuración.
En consonancia con ese prinunciamiento el Gobernador de Santa Cruz Rubén Costas sostuvo: “Estoy convencido que en las condiciones en las que estamos sería lo más imprudente llevar adelante un proceso electoral”.
La respuesta de las Organizaciones sociales integrantes del Pacto de Unidad, no se hizo esperar e informaron que se declararon en emergencia y advirtieron que, si se suspende las elecciones o se quita la personería jurídica a su partido, irán a las movilizaciones.
Lo cierto es que el gobierno de Añez intenta tomar la iniciativa y volver a la ofensiva para evitar a toda costa dejar el poder y no descarta desangrar con enfrentamientos a Bolivia, porque su objetivo es desestabilizar al país y llevarlo al precipicio para dejarle “los muertos” al próximo gobierno y hacerle mas difícil cualquier recuperación.