Confederación de Interculturales se pronuncia ante la violencia generada en contra de movimientos sociales que no están de acuerdo con el paro cívico de Camacho

(APC Bolivia). El secretario ejecutivo de la Confederación Sindical de Comunidades Interculturales Originarias de Bolivia (CSCIOB), Esteban Alavi, junto a su Comité Ejecutivo, expresó la preocupación e indignación de las comunidades interculturales de Bolivia, ante la actitud del gobernador Camacho, quien promueve actos de violencia mediante grupos de choque pagados que atacan las movilizaciones y protestas legítimas de ciudadanos que están contra el paro indefinido.
Afirmó que existe una gran mayoría de la población cruceña que, afectada por el paro indefinido, exige su derecho al trabajo, a la democracia y a la libre circulación. Denunció emboscadas realizadas por grupos de choque de Camacho, como la unión juvenil cruceñista, en contra de manifestaciones pacíficas en Pailón, Yapacaní, Concepción y otros lugares, con el uso inclusive de armas de fuego.
Reitero que el tema del censo es solo un pretexto que utiliza Camacho para encubrir un nuevo plan golpista que se viene impulsando desde Santa Cruz, por lo que solicitó la actuación de la justicia y el Ministerio Público de manera inmediata y pidió al gobierno hacer cumplir el orden constitucional y la Constitución para restablecer el orden en el Departamento, ante la tozudez y el capricho del gobernador.
Por su parte, el secretario general de la Federación Departamental de Comunidades Interculturales Originarios de La Paz, Hernán Aguirre, anunció que, en un ampliado, la organización tomó la decisión de apoyar los puntos de contrabloqueo instalados en defensa de la democracia, ante las acciones de violencia y emboscadas sufridas por las mismas, por lo que entre dos y tres mil afiliados viajarán a Santa Cruz para apoyar a sus compañeros de Santa Cruz.